En Afrikable el Comercio Justo se convierte en herramienta clave para conseguir el Empoderamiento Económico de la mujer. Entendemos el Comercio Justo como una herramienta de cooperación y justicia global, una estrategia de desarrollo sostenible que crea oportunidades para los pequeños grupos productores que habitualmente se encuentran en desventaja frente a las reglas del comercio tradicional internacional.
Seguimos los estándares marcados por la Organización mundial del Comercio Justo (WFTO), proporcionando salarios dignos, evitando la explotación infantil, ofreciendo un entorno de trabajo que respeta el medio ambiente y garantizando los derechos laborales de las trabajadoras, entre otros.
El Comercio Justo, a través de estos diez principios, contribuye de manera decisiva al avance de la Agenda 2030 y comparte con ella no solo su finalidad sino también su perspectiva integral y la necesidad de crear alianzas.
Que en swahili significa Grupo de mujeres que se valen por si mismas, es uno de los cuatro grupos productores de Afrikable. Fabrican principalmente complementos textiles de moda y ropa para el hogar.
Ninguna sabía coser a máquina en los inicios del proyecto, pero tras un periodo de formación gratuita donde también cobraban un salario digno, en la actualidad son capaces de producir artículos textiles de alta calidad.
Está formado por un grupo de seis mujeres que trabajan el reciclado, transformado materiales de deshecho en complementos de moda y artículos de hogar.
Son un grupo de mujeres que viven en la más extrema pobreza, y cuyo medio de vida antes de pertenecer al proyecto era la tala de árboles para hacer leña y carbón. A través del proyecto LRS se ofrece por un lado un trabajo digno y por otro un trabajo alternativo que protege el medio ambiente y la deforestación.
Elaboran bisutería tradicional maasai y artículos de regalo.
El sistema fuertemente patriarcal de la comunidad maasai amenaza continuamente los derechos de sus mujeres, las cuales no pueden poseer tierras ni ganado. Las decisiones son tomadas siempre por sus maridos, hermanos o hijos, incluso las que les afectan personalmente. Para poder colaborar en el proyecto, fueron sus maridos los que vinieron a conocer las condiciones de trabajo y los que las autorizaron a participar. En Afrikable están aprendiendo a leer y a escribir y a conocer sus derechos, y tambien ganan un salario digno que las hace económicamente independientes.
Elaboran sandalias y complementos de moda de alta calidad de manera absolutamente artesanal. En momentos de alta producción todas las mujeres del proyecto colaboran en la fabricación de sandalias, Junto con contrataciones puntales, hacen que el proyecto beneficie a cerca de 100 mujeres.
Muchas de estas mujeres, procedentes la mayoría de la región de Malindi, ya trabajaban anteriormente bordando las decoraciones de las sandalias, pero las condiciones laborales eran extremadamente precarias. En Afrikable su trabajo se ve garantizado a través de contratos de trabajo, seguridad social, vacaciones y días libres. Reciben un salario fijo y un extra en función de los productos elaborados, cuyo precio es muy superior al del mercado. Además en Afrikable reciben formación continua, aprendiendo el proceso completo del montaje del calzado (puesto exclusivo para hombres en el mercado laboral tradicional), que les permite ampliar sus posibilidades laborales futuras.
Un catálogo de historias, de empoderamiento, de superación y esfuerzo.
Con la compra de estos productos ayudas a mejorar las condiciones de vida de muchas familias en Lamu, Kenia.
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