«De entre todas nuestras vacaciones en familia, sin duda las que más recordaremos siempre son las que Afrikable nos brindó.
Pensé que podríamos ofrecerles muchísimo y resultó que el mayor regalo lo recibimos nosotros. Cada mañana el pequeño Baraka llegaba comiéndose una galleta y nada más ver a su amiga Daniela le daba la que traía para ella, porque los grandes corazones no entienden de cuerpecillos pequeños.
Los valores que mis pequeñas se trajeron no tienen precio y colaborar en su lucha fue algo maravilloso.
No olvidaré jamás el abrazo de mi adorable Docta, abrazado a mí en el muelle cuando nos volvíamos, «Inma mimi Spain». Cuánto amor desinteresado y qué manera más dulce de agradecer cualquier gesto de ayuda.
Fuimos a colaborar y nos ofrecieron una gran familia, ¡ojalá algún día podamos volver!»