La mayoría de mujeres utiliza las compresas normales, que además de ser más caras debido a que se deben comprar cada vez que se tiene el periodo, tienen componentes químicos que pueden provocar irritaciones e infecciones. Se le añade también la contaminación que provocan al desecharlas.
Sin embargo, estas nuevas compresas reutilizables hechas de algodón y tela traen consigo muchas ventajas. En primer lugar, gracias al material del que están hechas aumentan la comodidad y disminuyen el riesgo de que aparezcan infecciones o irritaciones. Además, tras su uso se lavan (con agua fría y jabón neutro) y se vuelven a utilizar, así hasta una duración de entre 2 a 3 años. De esta manera, económicamente sale más rentable.
Durante el taller se les explicó las ventajas y desventajas de dichas compresas y se respondió a las dudas que les fueron surgiendo. Pudieron además ver y tocar ellas mismas el material de muestra.
Mostraron mucho interés por este nuevo método de manera que las 15 compresas que había de muestra fueron dadas para su uso y prueba. Además, las mujeres pidieron que se trajesen 4 por persona.
¡Gracias de corazón a todas por colaborar y enhorabuena por tan bonita y necesaria iniciativa!
Autora: Iria Larrinaga